15 octubre 2009

Asocial: Que no se integra o vincula al cuerpo social. (RAE)

Llevo tiempo sintiéndome bastante “asocial”. Estos días reflexiono mucho sobre eso... En realidad pretendía contestar a un comentario, y me ha salido un post...

La cuestión es que me he dado cuenta de que rechazar el contacto de la gente no ocurre porque “uno es así de asocial”, sino porque se teme tanto no ser aceptado, tanto a que no nos quieran, que algunos pretendemos (inconscientemente) que si nos relacionamos poco tendremos menos riesgo a ser rechazados.
Sin embargo, la gente me demuestra cada día más que la cuestión no es cómo seamos, sino que tengamos ganas de compartirlo, de compartir nuestras virtudes pero también nuestros defectos.
Ayer hablaba con una íntima amiga mía de mis defectos, y los daba tan por hecho que casi me asusté. Me acepta tal y como soy. Eso da cierto vértigo. Pero somos capaces de hablar de ello como lo haríamos de cualquier otro tema. Lo que me ofrece la seguridad de que la amistad es precisamente ser capaz de aceptar al otro sin juzgar ni intentar cambiarle.
Quizá yo debería quererme más a mí misma para comprender que todos tenemos defectos y que, después del intento de reducirlos al mínimo, debe estar el convencimiento de que nos debemos aceptar como somos. Y no escondernos de los demás, sino dejarnos querer tal como debiéramos querernos a nosotros mismos.

7 comentarios:

Rosiña dijo...

mi madre siempre dice .. a las personas se las quiere por los defectos , porque por lo bueno todo el mundo las quiere .... (Que sabias son las madres)
Que bueno sería que sintieramos más a menudo esa sensación de vertigo, quizas sera el momento en que no nos importe lo que piensen y si importe lo que sentimos.

Un besazo

Sparrow dijo...

Yo me estoy mentalizando hace días. La gente es mala por naturaleza, por lo menos en su mayoría. No tendría que asustarme lo que piense nadie, y en cambio me afecta. Pero partiendo de esa base, quizá es más sencillo intentar "pasar" de lo que puedan pensar, no? Ande yo caliente y ríase la gente!
A veces penar demasiado no ayuda, así que déjate llevar y haz en cada momento lo que te de la gana! Yo estoy en ello...

Anónimo dijo...

Rosiña: Me gusta lo que dice tu madre. Es cierto que son sabias. También me gusta tu reflexión. Se nota que tu también eres madre.

Sparrow: Yo prefiero pensar que algunas personas se rigen primero por sus intereses y después por los del resto; y de esos, hay algunos a quien sus propios intereses les ocupan demasiado espacio y no les dejan ver las necesidades de los demás. Respecto a los primeros, soy más optimista que tu... quiero pensar que no son tan malos.
No me gusta pensar que la gente es mala por naturaleza, porque esa afirmación nos engloba a nosotros... No, definitivamente no me gusta.
Besos a los dos.

Sparrow dijo...

Pues aunque suene pedante a tope, me considero una excepción al resto, como te considero a ti también. Me mantengo en que la gente es mala por naturaleza, o dicho de otra manera, la gente es mala en su mayoría. Posiblemente podría aceptar cambiar la palabra "mala" por egoísta. Sólo hay que ir en coche para darse cuenta de ello. El anonimato los delata, a esa mayoría.

José Luis dijo...

Todo tiene sus grados, o dicho de otro modo; todo es relativo.
El egoísmo es innato en las personas, como mecanismo de supervivencia, pero un egoísmo más pronunciado no es más que un reflejo de la enorme inseguridad que genera nuestra sociedad consumista e individualista.
En realidad, y como siempre, lo que hay es mucha vagancia mental a la hora de informarse y eso es enemigo de la creación de empatía. Por otro lado, es muy interesante para los gobernantes esa situación.

abrazos a dojo.

Anónimo dijo...

Bueno, Sparrow, yo que soy una optimista empedernida prefiero pensar que la gente no es mala por naturaleza, porque destrozaría la poca esperanza que tengo en el futuro.
En lo de que la mayoría son egoístas sí puedo estar de acuerdo contigo. Así como que algunos como tú (¡y como yo!, ¡gracias por tu confianza!) intentemos alejarnos de esa mayoría. Es cierto que todas las personas tienen un fondo de egoísmo, pero cuando superan ciertos límites deja de ser una cuestión normal de supervivencia para ser algo atroz.
De hecho, si tengo que recordar, pienso que la gente que más daño me ha hecho en la vida estaban catalogados en esos “egoístas sin límite” que casi podría considerar gente mala.

Por otro lado, JL, no creo que haya nada relativo en que la gente cada día se mire más su ombligo y olvide que la vida se comparte con otros seres que tienen los mismos derechos. Y no creo que eso sea culpa de “la sociedad”.
Siempre se le echa la culpa como si la sociedad fuera algo... y en realidad no es más que la suma de todos nosotros. No es un ente y por supuesto no puede ser responsable de lo que nos pase. Pero cada día más tendemos a pensar que todo lo malo es culpa de la suerte, la sociedad, los políticos o lo que sea (menos que sea culpa nuestra). Acabamos como los italianos: “Piove? Porco governo!”
¡Empecemos a asumir nuestras propias responsabilidades!

¡Besos a ambos!

José Luis dijo...

Bueno, yo cuando digo sociedad estoy pensando en "la gente, yo incluído".
Y es que cada uno de nosotros, no puede generar una tendencia por si mismo, sino que ello sucede cuando una parte de la sociedad adopta un comportamiento o una característica concreta.
Por eso, cuando decimos que la sociedad es egoísta, estamos diciendo que una gran parte de sus elementos se comporta como tal. Tantos, que se traslada esa característica a la sociedad en general.
No perdamos el norte y el significado real de las palabras.

Besos.