Hoy he escuchado “es un infierno no saber”... el contexto no tenía nada que ver, pero me ha hecho pensar en algo que me pasa y que ha aparecido ante mis ojos de pronto.
Hace muchos años, poco más de dos décadas, alguien me hizo daño y nunca supe por qué. Hoy me doy cuenta de cuánto. Me doy cuenta de durante cuánto tiempo puede algo marcarnos sin que nos demos cuenta. Me doy cuenta de todas las veces que pregunté por qué sin respuesta.
Siempre me ha hecho gracia la obsesión de una amiga mía por saber por qué pasan las cosas, por qué la gente hace lo que hace. Hoy sé que todos tenemos esa necesidad de saber, cuando alguien nos hace daño, por qué motivo lo hace.
Suele haber un motivo. Yo creía que no, que puede que la gente nos haga daño sólo como un efecto colateral y que no puedan ni explicarlo. Pero no es así: siempre sabes. Otra cosa es que quieras o no explicarlo, pero sabes.
De pronto tengo tantas ganas de ponerme en contacto con gente a quien sé que dañé para decirles por qué... Gente con quien no supe relacionarme y que ahora entiendo por qué; y que me gustaría reconciliar diciéndoles por qué no supe quererles o apreciarles o simplemente escucharles...
Lo siento. No lo hice queriendo pero ocurrió porque..... Ojalá siempre pudiéramos expresarlo. Ojalá nunca quedaran porqués pendientes de surgir...
3 comentarios:
No lo hice queriendo, pero ocurrió porque......, ojala fuera tan facil, no creo que sea suficiente ni honesto. A veces, el orgullo del "afectado", tambien hace mas dificil una buena explicación. Ya que nunca te dirá hasta donde llegó su dolor. El miedo a hacerle mas daño tambien seria un obstaculo, ....en fin, mas corre un galgo que un mastin. Un abrazo muy fuerte desde la ciudad de las cinco vocales.
Querida Sísifo:
Tus palabras me han llegado directamente a lo más hondo. Yo también tengo cuentas pendientes (algunos las tienen conmigo). Siempre es liberador pedir perdón y perdonar, más allá de la idea cristiana de este hecho del perdón. Es difícil no herir, es difícil que no te hieran.Y sí, siempre hay alguna razón... no siempre expresable, no siempre comprensible.
Un fuerte abrazo y gracias por esta sabiduría que me has regalado (digo "me" porque así la he sentido).
Afri, ¡como me gusta verte tan cercana!! Nos vemos poco, pero tenemos algo que nos une y me alegra saber que estás cerca aunque estés lejos.
Que mis palabras te lleguen es un orgullo añadido.
Gracias por estar ahí. Un abrazo!!
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