02 mayo 2010

madres

Hoy es un día triste para nosotros. Perdimos a una madre y hoy, como tantos otros días, la lloramos.
Sin embargo, siempre que pienso en ella recuerdo lo que se reía. Seguro que hoy hubiera disfrutado, como lo hacía cualquier otro día. Se comía la vida como si fuera una fruta.
Desde que se fue, sigo intentando aprender a vivir así, disfrutando cada momento porque, como ya es manido y aunque lo digamos mucho nunca lo acabamos de comprender, cualquier momento puede ser el último.
Cualquier momento, incluso uno feliz.
Así que mejor que todos los momentos que podamos sean felices, para que nos puedan recordar con una sonrisa y no con un lamento.
Hoy no estoy muy feliz. Pero sigo intentando vivir la vida. Intento dar lo que puedo a cada segundo, buscando no perder nada y ganar todo lo que la vida pueda dar: Ganar todas las risas que sea posible.
Supongo que, cuando no se puede hacer otra cosa, intentarlo ya es suficiente.

2 comentarios:

Sparrow dijo...

Aún me parece increible, pero pese a todo mantengamos, como mínimo, la sonrisa!

Anónimo dijo...

Es lo que nos queda, Sparrow, es lo único que nos queda.......